La Joven Cuba y El País.com la comunidad
El diario El País, en sus blogs El País.com la comunidad, permite a sus usuarios crear de manera gratuita su página personal.
¿Qué es la comunidad?
La comunidad es el espacio donde los usuarios pueden crearse y mantener de manera gratuita su página personal en formato blog en ELPAIS.com. La dirección de la página personal será: http://lacomunidad.elpais.com/nombre-del-blog y permitirá al internauta tener un lugar donde escribir, colgar sus fotos, vídeos o audios y compartirlos con otros internautas.
La Comunidad será, de esta manera, la suma de todas las páginas personales de los usuarios de ELPAIS.com.
Los usuarios con página personal o blog en ELPAIS.com podrán formar sus propias comunidades de amigos según sus temas de interés, reflejadas en el menú de navegación y en las diferentes portadas y portadillas. A través de sus diarios online podrán compartir la información y los contenidos de sus bitácoras con otros internautas, así como debatir e intercambiar opiniones sobre sus temas preferidos.
¿Quién puede formar parte de La Comunidad? Todas aquellas personas que lo deseen: individuos particulares, asociaciones, ONGs, grupos de amigos, familias, equipos, divulgadores, aficionados a cualquier tema con ganas de conocer y compartir información, ... El único límite está en escribir con educación y respeto y no usurpar la identidad de otras personas (para más información, visita las normas).
Si tienes dudas sobre qué es un blog, cómo se crea uno y para qué sirve, hemos realizado una zona de Ayuda en formato weblog para que te sea más sencillo.
ELPAIS.com no se hace responsable de las ideas expresadas por los usuarios de La Comunidad.
Mi blog es una página personal y a través de ella puedo expresar todos mis criterios y opiniones y dar a conocer a los lectores un poco más acerca del punto de vista que tengo sobre la decana de las dictaduras totalitarias neo feudales.
Cualquier persona puede crear su propio blog dentro de ELPAIS.com. Es gratuito y no tardará más de un minuto. Cualquiera puede hacerlo. Sólo tiene que darle un nombre a al blog.
Manejar el blog es muy fácil. No es necesario tener algún conocimiento de programación porque ELPAIS.com te lo facilita todo, como si fuera un procesador de textos común. Simplemente se debe ingresar el nombre de usuario y la contraseña en la página principal de la ELPAIS.com y basta comenzar a publicar.
Lo que no se puede hacer es: violar las normas establecidas por El País. Para saber las normas es necesario entrar a la página web.
Tal vez el diario El País escoja a sus articulistas con pinzas. No es mi caso. No soy articulista. En todo caso bloguero. Y a mucha honra.
Puede ser que los articulistas del diario El País manipulen o tergiversen (por desconocimiento) la realidad cubana. Lo que para mí está claro es que, los referidos articulistas, son bastante comedidos cuando de criticar al régimen totalitario se trata. Tampoco es el caso. En mi blog me dedico a escribir mis propias experiencias. A plasmar, en blanco y negro, comentarios, criterios y opiniones, prohibidos bajo la dictadura totalitaria neo feudal de los hermanos (gallegos) Castro. No tengo nada en contra de los jóvenes matanceros. Contra los gallegos, solo una cuestión genética. Ellos no tiene la culpa de engendrar dictadores.
Si tildo de mentiroso a Harold Cárdenas Lema es, porque así lo considero. Creo mi deber expresarle mis más sinceras felicitaciones por darme una publicidad no solicitada. Espero que eso no le afecte en el futuro.
Remitiéndome al punto de la verguenza ajena, solo quiero matizar que es más vergonzoso defender a un tirano que, bien pudiera ser el bisabuelo del Sr. Harold. A ese tirano y su hermano ya les tuve respeto, en su momento. Ellos mismos se han desprestigiado y des-respetado. Trato, por todos los medios posibles, de respetar a Harold. Me cuesta muchísimo esfuerzo. Porque lo que escribe, muchas veces me provoca arcadas.
Sr. Cárdenas, no tergiverse mis palabras. Jamás he mencionado que le apueste a los intereses foráneos. Eso es de su invención. A usted lo que le han enseñado es a defender a un régimen que mantiene a nuestro pueblo en afrentas y oprobios sumido. Si, su "caballo" se llama Fidel Castro, eso es cosa suya. En los campos de Cuba conocí a un campesino que, había bautizado a los bueyes de su yunta como "Comandante" (el de la izquierda) y "bandolero" (el de la derecha). Siento mucho que la patria, para usted, sea un hipódromo. Hace mucho tiempo que dejaron de existir. Desde mi forma de ver y apreciar (los peligros y los principios) el sistema impuesto a nuestro pueblo es una cochiquera inmunda.
El Sr. Lema continúa tergiversando mi palabra escrita cuando me refiero a las entrañas del monstruo. Es verdad, la elección no ha sido coincidencia. Todo lo contrario. Le pongo nombre al monstruo. Le llamo "soviético" y me quedo corto si, parafraseando a José Martí, dijera que le conocí las entrañas. Claro está, mi honda no puede ser la de David. No soy judío. Soy cubano. Manchiviri lo único que tiene es una quimbumbia (en alusión al blog), que no sé si servirá para otra cosa que no sea denunciar las atrocidades cometidas por la dictadura neo feudal de sus dominus.
Sr. Harold, es posible que en los inicios del monstruo soviético, los obreros (que no los campesinos) tuvieran algún nexo con el gobierno. Le recuerdo que Rusia y las otras 14 naciones que se "unieron" a la Unión de los Consejos (soviet) constituían un Estado feudal, más que industrial. Muchos fueron los campesinos asesinados, a fin de imponer una agricultura regida, en su totalidad, por el nuevo Estado. Ahí están las diferencias. En Cuba, la tiranía se apropió de más del 70% de las tierras productivas. Menos del 30% quedaron en manos de la Asosiación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP). Asosiación ferreamente controlada por el des-gobierno y que, sin embargo (no me refiero a lo que ustedes llaman bloqueo) hoy produce más del 75% de los alimentos que se venden en los agromercados.
La "socialni vapros", de la cual tanto se vanagloriaba el régimen soviético, al decir que se encontraba "riechenó", era una mentira de tal magnitud que solo pude constatarla durante una travesía ferroviaria entre Moscú y Frunze (actual Bishkek).
La casualidad provocó que me encontrara con una niña de unos 10 años de edad, que viajaba con sus padres en el mismo tren. Conversar con una niña de tan corta edad es tarea harto difícil. Por tanto las preguntas eran simples. Las respuestas, daban que pensar.
Le pregunté su nombre, la edad, que grado de escolaridad se encontraba cursando y donde vivían. Me dijo que vivía en Frunze. Entonces y sin malicia mediante le dije:
"Hablas kirguiz"? Una mueca de repugnancia apareció en su rostro.
"No, yo hablo ruso", me contestó.
"Pero, no vas a la escuela en Frunze?", le pregunté.
"Si, yo voy a la escuela, pero a la escuela rusa."
Me encontraba verdaderamente picado con la respuesta. No podía quedarme en esa. Acudí a los padres. Estos me dijeron que efectivamente, ellos eran rusos que vivían en Kirguizia hacía más de dos generaciones. Ellos no se mezclaban con los kirguizes.
Los kirguizes, aparentemente tenían un gobierno propio y constituían una de las tantas repúblicas soviéticas. En Kirguizia habitaban menos de 4 millones de personas. La colonia rusa (desde la época de los zares) llegó a tener tantos habitantes como los propios nacionales. Eso trajo no pocos problemas luego del "desmerengamiento".
Lo que ví en aquellos tres días y tres noches, que se convertirían en seis, si contamos el retorno, fue la miseria más espeluznante. La sistematicidad del deterioro comenzó desde el inicio de la propia URSS. Coincido con el Sr. Cárdenas en que al final existía el desinterés total entre la población y los corruptos dirigentes de un sistema que no había cruzado la línea del feudalismo autocrático.
Dicho esto, no me queda otra alternativa que hacer comparaciones. Los funcionarios del régimen de los hermanos Castro, solo están interesados en mantener las prebendas que otorga el "máximo líder". Mientras, el pueblo acostumbrado a recibir el maná que distribuye el régimen , en forma de libreta de abastecimientos, espera mejoras en la calidad de vida.
Lo que hasta ahora se decía que era el sistema más justo, se va a bolina, cuando un millón 500 mil personas en edad laboral dejen de chupar de la teta de "papá estado", para contribuir con impuestos desproporcionados. Eso no es un sistema más justo. Culpar al pueblo, de todos los descalabros... Eso no tiene otro calificativo. Abuso de poder.
Sr. Lema, la sociedad civil dejó de existir en Cuba hace mucho tiempo. No me venga con cuentos de caminos. Lo que existe en nuestro país es la desnaturalización de la sociedad convertida en "tareas" y/u orientaciones del "centralismo democrático", siempre del nivel superior al inferior. Jamás a la inversa. Nunca la espontaneidad popular ha sido tan restringida. A lo único que se han dedicado, sobre todo en los últimos 20 años, es en velar (con unas pocas velas) los intereses de los funcionarios de eso que llaman partido y gobierno, que usted y yo sabemos perfectamente que son uno solo e indivisibles. La Patria se queda en las clases de propaganda oficialista (círculos de estudio y mesas redondas), donde mezclan la magnesia y la gimnasia a conveniencia.
El problema, que jamás podrán solventar es, que el pueblo de Cuba está cansado de que los sempiternos y "suceptibles" desgobernantes continúen cometiendo "errores" planificados.
Vamos hombre, que el imaginario social se quedaba en eso. Pura imaginación. Nos imaginabamos que estabamos construyendo algo que llamaban socialismo y que no era otra cosa que un nuevo feudalismo.
El Marxismo nos enseña que el hombre piensa como vive. Eso es cierto. Lo que no dice el marxismo es que el hombre tenga que vivir en afrentas y oprobios sumido como consecuencia del despilfarro del erario público de un régimen corrupto hasta la médula. La solución no puede ser la de suplantar un neo feudalismo salvaje, por un neo feudalismo de capital gubernamental. Eso es cambiarle el bocado al "caballo". Eso no le corrige el rumbo ni los errores.
En momento alguno trato de ser despectivo ni desfigurar la defensa que usted hace del proyecto neo feudal, ni del sentido que infructuosamente trata de transmitir. Las "libertades" alcanzadas:
la educación (con un nivel cada vez más bajo)
la salud (atendida el el 90% por estudiantes de medicina extranjeros) y condiciones higienico sanitarias denigrantes
la seguridad social. Cual? A nivel de que primer mundo. Eso es otra de las mentiras suyas. A que le llama usted seguridad social? A la miserable pensión que reciben nuestros jubilados?
Envidiados por quienes? Por los haitianos? Por los burundinenses? Por los pueblos más hambrientos del planeta? De ser así, estamos de acuerdo, pero no introduzca entre col y col la lechuga del primer mundo, porque eso sería intentar confundir a los incautos.
La libertad de viajar y regresar al país periodicamente se ha logrado, pero no gracias al régimen por usted defendido, sino por una suerte de rocambolismo entre convidantes y convidados. Salir de Cuba por medios propios es imposible, a no ser que un extranjero le envíe una carta de invitación (cada día más difícil). Las embajadas diplomáticas de casi todos los países del mundo no permiten a los cubanos viajar como turistas, aun en el caso que puedan demostrar que cuentan con ingresos, consecuencia del trabajo por cuenta propia. Ahora ya ni de esa forma, a partir de que el régimen inventara (por enésima vez) una moneda inconvertible llamada CUC. Ahora el extranjero convidante tiene que pagar hasta el pasaje de ida y vuelta al nacional convidado. La otra variante es que el cubano común acuda a la bolsa negra para cambiar la moneda inconvertible, en una moneda que valga. Pobres cubanos. Siempre al borde del delito impuesto.
Harold intenta una metáfora para ilustrar la situación en que vive el cubano común. Hace ya más de cincuenta años que el régimen totalitario le aprieta el gaznate a Liborio. Ahora, le dice al pueblo agonizante que la culpa es solamente suya porque se ha acostumbrado a vivir con el cuello apretado, pero que va a ser magnánimo y le va a dejar respirar un poquito nada más. Tal cual hicieron cuando aquello de los bandidos de Río Frío y el bando de tecnócratas de la JUCEPLAN. O, cuando en 1993 autorizaron la libre circulación del dólar, porque el régimen no tenía otra alternativa. O, lo que es igual, nos van a estar jodiendo sistematicamente cada vez que le venga en ganas a cualquiera de los dos (me refiero a los hermanísimos).
Algunas cosas que deben quedar claras entre Cárdenas (la persona y no la población de Matanzas) y el bloguero:
1.- Usted le llama presidente a Raúl Castro. Yo le llamo dictador en jefe.
2.- La mentalidad no se cambia de un día para otro.
3.- En Cuba no existe la sociedad civil. Fuera de las estructuras gubernamentales, no existe la categoría de ciudadanos que, actuando generalmente de manera colectiva (como concierne a cada persona individual) tomen desiciones en el ámbito público.
4.- Usted, como repetidora del discurso oficialista, no considera a los blogueros ni a los periodistas independientes, como representantes de la sociedad civil. Pues no, desde el momento que en Cuba no existe ese tipo de sociedad, estamos de acuerdo. Pero existen.
5.- En Cuba no hay democracia. El pueblo no tiene poder alguno. Coincidimos con "Buena Fé": Lo malo ya se ha amplificado. El régimen totalitario manipula a su antojo y conveniencia cualquier situación. Lo que les conviene lo anuncian, lo que no les conviene lo silencian o lo ocultan. Esa es la realidad que vive el pueblo cubano.
6.- Gracias por aclararme lo de Esteban Morales. Que lo han reivindicado. Quiere esto decir que el reclamo ha sido positivo a algo a lo que Morales tenía derecho. Espero que en algún momento escriba sobre política nacional.
7.- Las razones de seguridad, como en el caso de la enfermedad del equino dictador son un secreto de estado. Plenamente de acuerdo. En silencio tendrá que ser, pues hay cosas que no conviene que se entere la opinión pública nacional.
8.- Los intereses foráneos que usted alude en relación a las Damas de Blanco parece que nada tienen que ver con los prisioneros de conciencia que han muerto en las cárceles del régimen.
9.- Le doy las más efusivas gracias por el respeto para aquellos que disienten del régimen. No todos los blogueros hacen de eso un negocio, ni pretenden que sus opiniones coincidan con las de la mayoría. No obstante muchos se aproximan bastante.
10.- La dictadura de los hermanos Fidel y Raúl Castro es en la actualidad una enajenación colectiva que intenta continuar desgobernando un pueblo insatisfecho por demasiados motivos a lo largo de un período sumamente largo. Tal vez el pueblo no comparta las ideas disidentes. No se lo voy a negar. Tampoco comparte las ideas del régimen.
La palabra disidente no es sinónimo de manifestaciones suaves y decorosas. Son críticas a un sistema que ha hundido a Cuba en un pantano. La mayoría son personas que alguna vez en su vida colaboraron activa y decididamente a la creación de algo que jamás existió, a no ser en teoría. La mayoría de los disidentes no tiene pretensiones de pertenecer a una clase que ostente el poder sobre otra, como de hecho realiza el grupúsculo que desgobierna nuestro país. Muchos son los que aspiran a que en Cuba deje de existir la casta de funcionarios corruptos, soberbios y abusadores.
11.- A lo que van encaminadas las "reformas" raulistas son precisamente a dejar instaurada en el poder una clase gobernante como la que existe actualmente en Rusia.
12.- Es por eso que lo considero sospechoso de estar intentando, de forma diletante, prestigiar un sistema retrógrado. Usted no es el aniquilador. Usted se llama Harold Cárdenas Lema y es un cubano más. Lo que no puede decir es que sea contrario al poder. De ser así, estuviera en contra del proyecto.
13.- Denunciar las tropelías del régimen no significa siempre responder a algo o a alguien, como sucede a los que defienden un régimen dictatorial, totalitario y neo feudal. Si mis comentarios, criterios y opiniones sirvieran para defender al pueblo cubano, estaría satisfecho. No creo que al pueblo cubano le haga falta semejante defensa. Lo que pretendo es denunciar, disentir y con eso me basta.
Al principio de este artículo le digo que tener un blog en el diario El País no significa privilegio, ni prebenda alguna. Tal vez sea que a usted no le permiten tener un blog en el diaro El País. Tal vez sea que El País no es lo suficientemente "socialista". Si fuera un periódico como "El Mundo" o el "ABC" le daría la razón, pues estos no tienen blogs al servicio de la comunidad y pertenecen a la más remisa y austera sociedad de derechas de España.
Si por tener un blog en El País usted considera que este medio de prensa escrita pretende desacreditar a un blog de jóvenes universitarios, se equivoca. El País nada tiene que ver con mis comentarios, criterios y opiniones.
En el peor de los casos soy yo el que pretende desacreditar las suyas, porque las considero serviles (en buen cubano, GUATACA o jala leva), sin ofensa. Otra coincidencia, el papel aguanta, internet también.
El que no debe aguantar más es el pueblo de Cuba.
http://manchiviri.blogspot.pt/2016/02/los-olvidados-los-que-se-quedan.html
http://www.google.com/ig/adde?moduleurl=http://www.worldtimeserver.com/clocks/wtsclockgg1.xml&source=imag
https://www.cubanet.org/opiniones/muy-joven-para-el-partido-y-muy-viejo-para-la-ujc/
Graciosa respuesta, leí con mucha atención. Ya lo promocioné suficiente amigo, creo que no sería un error decir que esta va a ser la mayor publicidad que tendrá en su vida de bloguero, pero regreso a LJC que tengo mejores cosas que hacer.
ResponderEliminarNo responderé porque aunque los argumentos existen evidentemente para usted esto es un juego o un negocio y yo tengo cosas más importantes que hacer.
Saludos
Disculpe que no le haya atendido de inmediato.
ResponderEliminarLe estoy muy agradecido por la publicidad gratuita. Por cierto: Ya se confesó con el oficial de la CI que lo atiende? Espero que no le traiga consecuencias desagradables.
Por otra parte, quiero reiterarle, que no necesito respuestas suyas. Esto no es un juego. Mucho menos un negocio. Es una denuncia, en toda regla, contra un régimen que oprime al pueblo cubano durante cinco décadas y a todos aquellos, que como usted, se dedican a defenderlo.