Harold |
Dice el refrán que, más rápido se atrapa a un mentiroso que, a un cojo. Es el caso de Harold Cárdenas Lema, que tal vez sea universitario. no lo dudo.
El concepto de Utopía o Utopia vio la luz, por primera vez, de la mano de Tomás Moro. La palabra deriva de dos neologismos griegos: outopia (formado por ou -ningún- y topos -lugar-) y eutopia (eu significa -buen-).
Thomas More (su nombre en inglés) no escribió una "utopia socialista", como nos dice Harold. El nombre original de la obra, es en la lengua de la cual derivan todas las "lenguas romances", el Latín: "De optimo rei publicae statu deque nova insula Utopia". Por ninguna parte aparece la palabra socialismo.
Moro publicó Utopia entre 1515 y 1516. Casi un siglo después, Jonathan Swift publicó "Gulliver´s travels", donde el autor se refiere a las ideas socialistas, de forma no muy generosa.
La diferencia entre ambos trabajos estriba en que, mientras la obra de Moro es reducida y casi en forma de tratado filosófico, la de Swift es amplia y novelada.
La de Moro nos muestra un mundo ideal. Swift critica el mundo en que vive. El primero es un soñador. El segundo, es un hombre práctico.
En la obra de Moro la gente no tiene, ni siente la necesidad de viajar. La obra de Swift es un viaje permanente. Tal vez digan que solo el protagonista viajaba. No es así; junto a Gulliver viajaban infinidad de personas.
Cárdenas se refiere a una visión futurista al más puro estilo de Nostradamus. A los cubanos no ha tocado el infortunio de vivir en una isla des-gobernada por un esquizofrénico, que en las postrimerías de su vida inútil, pretende convencernos de que es profeta.
Antes de continuar debo exponer otra mentira de Lema: En Cuba jamás se ha pretendido construir una sociedad socialista. "De cada cual, según su capacidad". "A cada cual, según su trabajo". Jamás se ha aplicado en nuestro país.
Otra de las diferencias que caracterizan a ambos autores, es la definición del carácter de los seres humanos, cuando Gulliver nos dice que:
"Los hombres nunca son tan serios y responsables, como cuando están defecando".
Fidel Castro, hizo honor a tamaña frase cuando, ante el altercado estomacal que le salía en torrente por el recto, renunció a todos sus cargos.
Señor Harold Cárdenas Lemas: Tal vez las ideas socialistas se hayan hecho para las personas. Nuevamente nos está mintiendo, desde el momento en que en Cuba no se ha aplicado. Todo lo contrario.
Los mecanismos que aplica el des-gobierno están encaminados a garantizar, en primer y único lugar, la supervivencia del atajo de funcionarios corruptos del Partido Único y el Poder Popular.
Las necesidades del pueblo pueden esperar hasta dos términos de de cinco años.
Hace ya bastante tiempo que las políticas, que el régimen aplica son totalmente impopulares. La cuestión migratoria es más compleja. Usted la maneja demasiado livianamente. Porque una cosa es viajar y otra, bien distinta es huir de la miseria.
Si el viajar dependiese de un gobierno fuerte (usted le llama Estado) estamos fritos.
El período especial comenzó en Cuba en el año 1962, con el establecimiento de la Libreta de Abastecimiento.
Es cierto que tuvimos años menos duros, cuando la ayuda de la URSS y los "demás" países del Campo Socialista, nos trataban tan "generosamente", mientras hacíamos el trabajo sucio en Asia, África y América Latina.
El Pueblo cubano jamás olvidará el primer periodo especial de finales de los sesenta y principios de los setenta. El segundo aun hoy se encuentra latente. Ambos períodos se diferenciaron, tal cual las obras mencionadas.
El primero fue más "parejo".
Durante el segundo ya la corrupción campeaba y las diferencias que propició el desgobierno, en aras de aferrarse a la boya salvavidas, provocó un segundo éxodo masivo.
El primer éxodo, el del Mariel, fue provocado (tal vez sin querer) por la política de los mismos derechos humanos que Cárdenas cita en su mentiroso escrito.
No voy a negar que el embargo económico impuesto al des-gobierno dictatorial, totalitario y neo feudal de los hermanos Castro Ruz, no haya afectado al ciudadano cubano. Sería como tapar el sol con un dedo. Pero el daño que los hermanos dictadores le han hecho a la economía cubana..., eso tiene un solo nombre: Fidel Castro Ruz.
Harold, mentiroso. Lo que dices de la desaparición del Estado, es tan dogmático en sí mismo, que se desacredita. El Estado (la nación) no desaparece. En todo caso podría hablarse, en un mundo globalizado, que desaparezcan los gobiernos.
En lo que ambos coincidimos (tu por ignorante) es que en Cuba lo que se ha intentado hacer es una utopía. O lo que es igual, un sistema irrealizable (utopía), en lo referente al socialismo. Por el contrario, muy realizable en lo referente al totalitarismo neo feudal.
En los dos períodos, antes citados, el régimen podía haber cambiado el nombre de San Cristóbal de La Habana y designar a la Capital de todos los cubanos con el nombre de Amaurota (oscuridad en griego).
Hay cierta similitud entre el sistema agrícola de Utopía y el sistema impuesto al pueblo de Cuba por los hermanos dictadores.
Cito de Utopía:
Los ciudadanos se turnan para vivir por períodos de dos años a trabajar como agricultores. Cada año, la mitad de los agricultores es enviada a la ciudad y la misma cantidad de personas deja la ciudad y va a trabajar en el campo.
Claro More no entendía la diferencia entre un agricultor y un obrero agrícola. Siendo muy ingenuo diría, que los hermanos Castro tampoco.
De Utopia:
Las casas son construidas iguales. Las casas no les pertenecen a los ciudadanos, ya que en Utopía no hay propiedad privada, y cada diez años cambian de casa por sorteo. Cualquier semejanza no es, para nada, casualidad.
El sistema electoral es muy semejante también. De esa forma pudiéramos llamar "filarca" a la circunscripción y "sifogrante" al delegado. A nivel de provincia la Asamblea estaría dirigida por un traniboro ( que en griego quiere decir glotón, porque es el que preside la mesa). El traniboro sería el Filarca en Jefe. En Utopía elegirían un príncipe vitalicio.
A diferencia del sistema que nos han impuesto, el príncipe podría ser depuesto en caso de sospecha de tiranía.
Existiría la pena de muerte.
Hasta aquí las comparaciones.
Continuar sería muy extenso y aburrido.
Cárdenas Lema dedica tres grandes párrafos, de su artículo, a cantinflear con el tema de los viajes al exterior. El solo les llama "viajes" a secas. Que si el académico esto, que si el barbero lo otro. Que si el manicero se va...
Al final llega a una conclusión veladamente esclarecida: Dejar viajar (el dice dejar salir, como si se tratara de prisioneros) y regresar a todo el que lo desee.
Para ser medianamente honestos, y no como Harold, debemos decir que hoy por hoy, la libertad de viajar de los cubanos se encuentra más restringida por los gobiernos de los países supuestamente a ser visitados. Son pocos los consulados o embajadas que otorgan visa de turista a los ciudadanos cubanos, (por no decir ninguno) en territorio cubano.
El ciudadano cubano tiene dificultades para regresar a su país, en caso que quisiera hacerlo. Aunque no tenga causas contra el régimen o causas criminales pendientes.
Cuando se impuso el sistema totalitario en Cuba, ocurrió algo aterrador. Se rompió el equilibrio existente en lo que conocemos como Ley de oferta y demanda. Y se fue directamente al igualitarismo que nos apropincua al absurdo y el ridículo.
Las aguas siempre tenderán a recuperar su nivel. Eso ocurrió cuando dejó de existir el campo socialista y luego la propia URSS. Comenzó, gradualmente a desaparecer el igualitarismo. El daño ya estaba hecho.
Para tu información Harold, ya son muchos los que viajan al extranjero con el sudor de su frente y no como los hijos de los corruptos que dicen dirigir el país. La diferencia consiste en que los cubanos tienen que pagar mucho más por los trámites (internos y externos). Otra cosa: en Cuba ya no queda nada de igualitarismo, solo queda la propaganda igualitaria del régimen de oprobio.
La salida del país, de profesionales jóvenes, es el fruto del desgobierno totalitario. Por esa vía han salido desde 1993, a la fecha, más de un cuarto de millón de personas. En su mayoría son personas con títulos. En los acuerdos migratorios, consecuencia de la estampida, post maleconazo, los Estados Unidos escogen a las personas.
La última mentira de Harold Cárdenas Lema es la siguiente:
"Si tenemos un profesional de la salud o la educación superior, esta persona le ha costado miles de pesos, en su formación, al Estado..."
En qué quedamos: Es, o no es, gratis la educación? Si tienes que pagar, entonces la educación no es gratis.
http://manchiviri.blogspot.pt/2012/12/los-diez-mandamientos-y-el-partido-de_12.html
http://manchiviri.blogspot.pt/2016/02/los-olvidados-los-que-se-quedan.HTML
El concepto de Utopía o Utopia vio la luz, por primera vez, de la mano de Tomás Moro. La palabra deriva de dos neologismos griegos: outopia (formado por ou -ningún- y topos -lugar-) y eutopia (eu significa -buen-).
Thomas More (su nombre en inglés) no escribió una "utopia socialista", como nos dice Harold. El nombre original de la obra, es en la lengua de la cual derivan todas las "lenguas romances", el Latín: "De optimo rei publicae statu deque nova insula Utopia". Por ninguna parte aparece la palabra socialismo.
Moro publicó Utopia entre 1515 y 1516. Casi un siglo después, Jonathan Swift publicó "Gulliver´s travels", donde el autor se refiere a las ideas socialistas, de forma no muy generosa.
La diferencia entre ambos trabajos estriba en que, mientras la obra de Moro es reducida y casi en forma de tratado filosófico, la de Swift es amplia y novelada.
La de Moro nos muestra un mundo ideal. Swift critica el mundo en que vive. El primero es un soñador. El segundo, es un hombre práctico.
En la obra de Moro la gente no tiene, ni siente la necesidad de viajar. La obra de Swift es un viaje permanente. Tal vez digan que solo el protagonista viajaba. No es así; junto a Gulliver viajaban infinidad de personas.
Cárdenas se refiere a una visión futurista al más puro estilo de Nostradamus. A los cubanos no ha tocado el infortunio de vivir en una isla des-gobernada por un esquizofrénico, que en las postrimerías de su vida inútil, pretende convencernos de que es profeta.
Antes de continuar debo exponer otra mentira de Lema: En Cuba jamás se ha pretendido construir una sociedad socialista. "De cada cual, según su capacidad". "A cada cual, según su trabajo". Jamás se ha aplicado en nuestro país.
Otra de las diferencias que caracterizan a ambos autores, es la definición del carácter de los seres humanos, cuando Gulliver nos dice que:
"Los hombres nunca son tan serios y responsables, como cuando están defecando".
Fidel Castro, hizo honor a tamaña frase cuando, ante el altercado estomacal que le salía en torrente por el recto, renunció a todos sus cargos.
Señor Harold Cárdenas Lemas: Tal vez las ideas socialistas se hayan hecho para las personas. Nuevamente nos está mintiendo, desde el momento en que en Cuba no se ha aplicado. Todo lo contrario.
Los mecanismos que aplica el des-gobierno están encaminados a garantizar, en primer y único lugar, la supervivencia del atajo de funcionarios corruptos del Partido Único y el Poder Popular.
Las necesidades del pueblo pueden esperar hasta dos términos de de cinco años.
Hace ya bastante tiempo que las políticas, que el régimen aplica son totalmente impopulares. La cuestión migratoria es más compleja. Usted la maneja demasiado livianamente. Porque una cosa es viajar y otra, bien distinta es huir de la miseria.
Si el viajar dependiese de un gobierno fuerte (usted le llama Estado) estamos fritos.
El período especial comenzó en Cuba en el año 1962, con el establecimiento de la Libreta de Abastecimiento.
Es cierto que tuvimos años menos duros, cuando la ayuda de la URSS y los "demás" países del Campo Socialista, nos trataban tan "generosamente", mientras hacíamos el trabajo sucio en Asia, África y América Latina.
El Pueblo cubano jamás olvidará el primer periodo especial de finales de los sesenta y principios de los setenta. El segundo aun hoy se encuentra latente. Ambos períodos se diferenciaron, tal cual las obras mencionadas.
El primero fue más "parejo".
Durante el segundo ya la corrupción campeaba y las diferencias que propició el desgobierno, en aras de aferrarse a la boya salvavidas, provocó un segundo éxodo masivo.
El primer éxodo, el del Mariel, fue provocado (tal vez sin querer) por la política de los mismos derechos humanos que Cárdenas cita en su mentiroso escrito.
No voy a negar que el embargo económico impuesto al des-gobierno dictatorial, totalitario y neo feudal de los hermanos Castro Ruz, no haya afectado al ciudadano cubano. Sería como tapar el sol con un dedo. Pero el daño que los hermanos dictadores le han hecho a la economía cubana..., eso tiene un solo nombre: Fidel Castro Ruz.
Harold, mentiroso. Lo que dices de la desaparición del Estado, es tan dogmático en sí mismo, que se desacredita. El Estado (la nación) no desaparece. En todo caso podría hablarse, en un mundo globalizado, que desaparezcan los gobiernos.
En lo que ambos coincidimos (tu por ignorante) es que en Cuba lo que se ha intentado hacer es una utopía. O lo que es igual, un sistema irrealizable (utopía), en lo referente al socialismo. Por el contrario, muy realizable en lo referente al totalitarismo neo feudal.
En los dos períodos, antes citados, el régimen podía haber cambiado el nombre de San Cristóbal de La Habana y designar a la Capital de todos los cubanos con el nombre de Amaurota (oscuridad en griego).
Hay cierta similitud entre el sistema agrícola de Utopía y el sistema impuesto al pueblo de Cuba por los hermanos dictadores.
Cito de Utopía:
Los ciudadanos se turnan para vivir por períodos de dos años a trabajar como agricultores. Cada año, la mitad de los agricultores es enviada a la ciudad y la misma cantidad de personas deja la ciudad y va a trabajar en el campo.
Claro More no entendía la diferencia entre un agricultor y un obrero agrícola. Siendo muy ingenuo diría, que los hermanos Castro tampoco.
De Utopia:
Las casas son construidas iguales. Las casas no les pertenecen a los ciudadanos, ya que en Utopía no hay propiedad privada, y cada diez años cambian de casa por sorteo. Cualquier semejanza no es, para nada, casualidad.
El sistema electoral es muy semejante también. De esa forma pudiéramos llamar "filarca" a la circunscripción y "sifogrante" al delegado. A nivel de provincia la Asamblea estaría dirigida por un traniboro ( que en griego quiere decir glotón, porque es el que preside la mesa). El traniboro sería el Filarca en Jefe. En Utopía elegirían un príncipe vitalicio.
A diferencia del sistema que nos han impuesto, el príncipe podría ser depuesto en caso de sospecha de tiranía.
Existiría la pena de muerte.
Hasta aquí las comparaciones.
Continuar sería muy extenso y aburrido.
Cárdenas Lema dedica tres grandes párrafos, de su artículo, a cantinflear con el tema de los viajes al exterior. El solo les llama "viajes" a secas. Que si el académico esto, que si el barbero lo otro. Que si el manicero se va...
Al final llega a una conclusión veladamente esclarecida: Dejar viajar (el dice dejar salir, como si se tratara de prisioneros) y regresar a todo el que lo desee.
Para ser medianamente honestos, y no como Harold, debemos decir que hoy por hoy, la libertad de viajar de los cubanos se encuentra más restringida por los gobiernos de los países supuestamente a ser visitados. Son pocos los consulados o embajadas que otorgan visa de turista a los ciudadanos cubanos, (por no decir ninguno) en territorio cubano.
El ciudadano cubano tiene dificultades para regresar a su país, en caso que quisiera hacerlo. Aunque no tenga causas contra el régimen o causas criminales pendientes.
Cuando se impuso el sistema totalitario en Cuba, ocurrió algo aterrador. Se rompió el equilibrio existente en lo que conocemos como Ley de oferta y demanda. Y se fue directamente al igualitarismo que nos apropincua al absurdo y el ridículo.
Las aguas siempre tenderán a recuperar su nivel. Eso ocurrió cuando dejó de existir el campo socialista y luego la propia URSS. Comenzó, gradualmente a desaparecer el igualitarismo. El daño ya estaba hecho.
Para tu información Harold, ya son muchos los que viajan al extranjero con el sudor de su frente y no como los hijos de los corruptos que dicen dirigir el país. La diferencia consiste en que los cubanos tienen que pagar mucho más por los trámites (internos y externos). Otra cosa: en Cuba ya no queda nada de igualitarismo, solo queda la propaganda igualitaria del régimen de oprobio.
La salida del país, de profesionales jóvenes, es el fruto del desgobierno totalitario. Por esa vía han salido desde 1993, a la fecha, más de un cuarto de millón de personas. En su mayoría son personas con títulos. En los acuerdos migratorios, consecuencia de la estampida, post maleconazo, los Estados Unidos escogen a las personas.
La última mentira de Harold Cárdenas Lema es la siguiente:
"Si tenemos un profesional de la salud o la educación superior, esta persona le ha costado miles de pesos, en su formación, al Estado..."
En qué quedamos: Es, o no es, gratis la educación? Si tienes que pagar, entonces la educación no es gratis.
http://manchiviri.blogspot.pt/2016/02/los-olvidados-los-que-se-quedan.HTML
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