lunes, 14 de septiembre de 2020

Banco Interamericano de Desarrollo BID


La voluntad del gobierno de los Estados Unidos de ubicar a un funcionario cubano-americano en el BID, crea una estabilidad y un enaltecimiento para los pueblos sometidos al comunismo internacional. Es difícil encontrar a alguien más indicado. Sumará a toda la región intentando conformar una agenda de equidad contraria al nefasto “internacionalismo proletario” que propugna la dictadura comunista de La Habana.

A lo largo de los años, el BID ha agregado nuevos países y ha aumentado su capital en nueve veces. Estas acciones han permitido que el BID incremente el apoyo al alivio de la pobreza y otros programas de desarrollo que han ayudado a transformar a América Latina y el Caribe. Si bien aún queda mucho por hacer, los indicadores sociales de la región mejoraron notablemente en varios aspectos, como alfabetización, nutrición y esperanza de vida.

El 16 de junio de 2020 el Departamento del Tesoro de EE. UU., a través del secretario Steven Smunchin anunció oficialmente la candidatura de Carone a la presidencia del BID, destacando Mnuchin que: «la nominación del señor Claver-Carone demuestra el fuerte compromiso del presidente Trump con el liderazgo de Estados Unidos en importantes instituciones regionales y con el avance de la prosperidad y la seguridad en el hemisferio occidental», y al día siguiente el gobierno de Colombia comunicó su apoyo a Claver-Carone. A continuación Brasil, Uruguay y Paraguay también hicieron público su apoyo al candidato Claver Carone.

El 12 de septiembre de 2020 la Asamblea de Gobernadores sesionó de manera virtual para elegir al nuevo presidente, resultando elegido con el 66,8% y un 31,23 % de abstenciones de los votos el único postulante por un período de cinco años, el abogado de origen hispanocubano Claver-Carone, tras el retiro del argentino Gustavo Béliz.

Claver-Carone es comocido por su anti-comunismo militante.



Wikio – Top Blogs

domingo, 6 de septiembre de 2020

Derrocar la dictadura, de los hermanos Castro, es una política de gobierno de los Estados Unidos




La cadena hotelera estadounidense Marriott nunca debió haber abierto sus operaciones al servicio una dictadura totalitaria. Es lógico, que el Gobierno de Estados Unidos le invalide la licencia.

Es una medida más del cerco económico contra la dictadura totalitaria, que se suma a los cientos de acciones dictadas por el Ejecutivo de Washington durante la administración de Donald Trump.

Por solo citar algunos ejemplos, en junio de 2019 la OFAC y el Buró de Industria y Seguridad (BIS) anunciaron medidas que incluyeron la denegación de licencias para viajes en cruceros, embarcaciones recreativas y aeronaves privadas.

La OFAC ese año, entre otras, impuso sanciones a las compañías estadounidenses Expedia Group Inc., Hotelbeds USA Inc. y Cubasphere Inc.
La prohibición de negocios, al amparo del Título III de la Ley Helms-Burton, de compañías hoteleras extranjeras que tienen negocios con la dictadura, ha sido una constante en la política los administradores de la Casa Blanca.

En octubre de 2019, el Departamento de Transporte anunció la suspensión de todos los vuelos de aerolíneas norteamericanas que mantuvieran negocios con la dictadura totalitaria, con excepción de los dirigidos al aeropuerto internacional José Martí de La Habana, y a partir de agosto de 2020 prohibió los vuelos chárter privados.

Es una política de Estado, que forma parte de una manera de ver el mundo desde una perspectiva de la realidad, donde se privilegia la democracia y los derechos humanos sobre una dictadura feroz.

El comunismo no es un enemigo imaginario. El comunismo es el enemigo mortale de nuestra concepción del mundo democrático y del comercio en libertad, de la independencia y soberanía.

El comunismo es el «poder duro», el más rancio adversario que estamos sufriendo desde el mes de octubre de 1917.


Wikio – Top Blogs

La Guerra Innecesaria, Mesopotamia Angolana, Ruacana Opinión de un compañero

             La Guerra Innecesaria, Mesopotamia Angolana, Ruacana                                       Opinión de un compañero Quién fuera ...