Respuesta a Pedro Campos, autor del artículo
http://www.14ymedio.com/opinion/Venezuela-fracaso-chavismo-fidelismo-socialismo-XXI_0_1924007592.html
Se podrá teorizar todo lo que se quiera, pero decir que Hugo Chávez es el resultado de una crisis política y económica del capitalismo, en Venezuela, es como decir que lo mismo podía haber sucedido en toda
El concepto “Socialismo del
Siglo XXI” de Heinz
Dieterich Steffan (intento de pesadilla después del
desmerengamiento) hace su aparición en 1996. No es hasta casi diez años
más tarde, un 30 de enero del año 2005, que Hugo Chávez Frías hace alusión al
mismo.
De manera que, desde 1998,
en que Chávez asumió el poder, no se aplicó el concepto. Primero tenía que
desmontar el antiguo sistema y adaptarlo a su antojo y conveniencia. Y a eso se
dedicó durante 9 años, además de la campaña proselitista para el aumento de los
precios del barril de petróleo, que en 1998 era de $7.00 dólares
norteamericanos.
En el 2001 el gobierno de
Chávez interviene, por decreto PDVSA. Ya para el 2005 había ocurrido el intento
de derrocamiento (2002), que aún no se sabe a ciencia cierta si fue autónomo o
provocado. Pero el precio del barril había aumentado (2005) hasta los $80.00.
Volvamos atrás. Todo eso de
democracia participativa y el progreso de forma autogestionaria y cooperativas
de producción, suena muy bien al oído de cualquier cerebro. El problema
continúa siendo el mismo. Nada funciona por generación espontánea. Ni los
llamados “revolucionarios”. ¿Cómo se gestiona todo esto? ¿Cómo hacer entender,
a las personas que, todo, es de todos? ¿Quién controla todo? ¿Cómo evitar la
corrupción y la malversación de los funcionarios?
Si esto era lo que despertaba
esperanza en los venezolanos, al que no quiere caldo le dan tres tazas. Pero
no, al pueblo venezolano, como sucedió con el cubano, lo enamoraron en base a
promesas que los propios prometedores sabían que eran falsas.
No es que durante los
des-gobiernos de Hugo Chávez y Fidel Castro se fueran abandonando las esencias
del proyecto. El desgobierno se hacía paternalista desde el principio y la
acción de la burocracia era el resultado de su incompetencia. Todo aquello que
no es productivo y se potencia, por ejemplo movimiento de masas, instituciones
diversas, movilizaciones diversas, clientelismo, provoca desgaste económico
irremplazable. Si a esto le agregamos que para obtener la ayuda internacional
favorece a gobiernos vecinos obsequiándoles petróleo barato, el desgaste
económico se convierte en despilfarro.
El boom petrolero no surgió
de la noche a la mañana. Si en el 2005 ya había llegado a $80.00, en tres años
llegó a los $148.00. Fue una escalada planeada y ejecutada desde las entrañas
de la OPEP. Y el
régimen de Hugo Chávez, en vez de utilizar ese dinero en desarrollar el país,
hacía todo lo contrario. Despilfarraba el dinero, nacional e
internacionalmente. Para justificarse ante el pueblo, decían que Venezuela y
Cuba se encontraban asediadas por el imperialismo.
A Chávez ya se le había
subido el petróleo a la cabeza. Se creía invencible. No es que se le olvidaran
las bases económicas. Dudo mucho que supiese algo de economía. No se encontraba
aplicando el Socialismo del Siglo XXI, sino que engendraba el régimen
dictatorial, totalitario y neo feudal implantado en Cuba por Fidel Castro.
No voy a citar toda la
propaganda comunista. Solo me voy a referir al ALBA. Venezuela pretendió
echarse en hombros a todos los países anglófonos e iberoamericanos que le
siguiesen en sus andanzas despilfarradoras. Menos mal que no hubo muchos que
cayeron en la trampa.
Tal como lo pensaron Chávez
y sobre todo Fidel, el ALBA nunca hubiera podido ser un proyecto de integración
y mucho menos revolucionario. ¿Cómo podían haber contemplado la ínter actuación
desde abajo, desde las bases económicas, políticas y sociales de los países
involucrados, si ambos “caudillos” solo pensaban en beneficio propio? ¿Cómo
podrían haber unificado la moneda si hasta el día de hoy en Cuba no se ha
realizado? ¿Cómo liberar los movimientos de personas y capitales, si de lo que
trata el totalitarismo es de restringir? ¿Qué es eso de financiar el desarrollo
de una economía solidaria, que no sea regalar el dinero del pueblo en la
búsqueda de réditos políticos a escala internacional?
Todo lo de la “Integración
Bolivariana” no es otra cosa que el más cruel de los populismos.
No coincido para nada en
que se haya perdido la oportunidad de realizar el proyecto chavista original.
Por el contrario, creo que hay que darle gracias a Dios de que no fuese ese su
proposito.
El socialismo, como teoría
pasa, pero en la práctica, no funciona. Y no es la teoría la culpable, es el
ser humano y sus imperfecciones y diferentes tipos de desarrollo histórico,
educacional, cultural, civil y otros muchos etcéteras.
Heinz Dieterich, nos dice
Campos, que es el principal promotor internacional de las ideas del socialismo
del siglo XXI y quien asesoraba inicialmente a Chávez, señaló el pasado 4 de
enero el periódico El Nacional:
"Me desilusioné cuando
mi amigo Hugo Chávez no impuso, por muchas razones, esa combinación de
desarrollismo criollo posible y el paradigma científico-político del socialismo
del siglo XXI, que hubiera puesto a Venezuela en la vanguardia de la sociedad
global. Sin embargo, del socialismo del siglo XXI solo usó el término, no la
institucionalidad respectiva. Por eso, ninguna persona sensata puede decir que
hubo socialismo del siglo XXI en el país. Lo que fracasó en Venezuela fue un
proyecto de desarrollismo criollo mal ejecutado. Mi desilusión, sin embargo,
fue continental. Hablé con casi todos los presidentes progresistas de América
Latina y del Caribe y ninguno tenía una intención seria de trascender el
sistema capitalista con una nueva civilización".
Pero no acaba de reconocer
el error. Lo que no funciona es el socialismo, porque a estas alturas donde único
funciona el precepto marxista: «De cada cual según su capacidad. A cada cual
según su trabajo», es en los países desarrollados. Y este precepto jamás ha
sido alcanzado en ninguno de los países por dónde haya transitado el
totalitarismo.
La muerte de Chávez y su
sustitución por Maduro fue una bendición divina (y yo no creo en bendiciones)
para el pueblo venezolano. ¡Si Fidel Castro hubiese muerto de cáncer en 1974! ,
estaríamos diciendo que no le había alcanzado el tiempo para desarrollar el
programa original.
El fracaso del chavismo no
tiene nada que ver con la llegada de la derecha a
Todo lo que lleve implícito
la palabra SOCIALISMO es un fracaso por adelantado.
Lo que le ocurre al
chavismo-fidelismo no es fracaso. Fidel, con su sagacidad, lo ha caracterizado
mejor, es «DESMERENGAMIENTO». No tengo dudas de que aquellos gobiernos que se
beneficiaron de las regalías del ALBA, van a sufrir las consecuencias. Los
pueblos no. La mayoría de esos países aun son democráticos.
Ni Chávez y mucho menos
Fidel Castro estuvieron nunca interesados en las teorías de Heinz Dieterich. El
que piense así debe estar en la categoría de los hombres ilusos.
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